La casa que partió nuestros corazones: Un relato de herencia y culpa
El día que cedí mi parte de la casa familiar a mi hermano, nunca imaginé que esa decisión rompería a mi familia. Ahora, la casa que debía ser símbolo de unión es fuente de resentimientos y silencios. Cada noche me pregunto si hice lo correcto o si solo fui otro hijo egoísta.