El mensaje que nunca debí guardar
Una noche, mi vida cambió cuando un mensaje de texto que nunca debí guardar cayó en manos equivocadas. La traición, la desesperación y el miedo se apoderaron de mi familia y de mí, mientras luchábamos contra las consecuencias de un simple descuido. Ahora, me pregunto si alguna vez podré recuperar la tranquilidad que perdí.