El almuerzo del domingo en casa de mamá Lucía: La verdad que duele más que la sopa salada

El almuerzo del domingo en casa de mamá Lucía: La verdad que duele más que la sopa salada

El almuerzo dominical en casa de mi mamá Lucía siempre fue sagrado, pero ese día todo cambió cuando mi cuñado Javier dijo en voz alta lo que todos callábamos. Sentí cómo la mesa se convertía en un campo de batalla entre la verdad y las mentiras familiares, y cada palabra era como un golpe al corazón. Ahora me pregunto: ¿vale la pena vivir en la mentira por mantener la paz, o es mejor decir la verdad aunque todo se rompa?