¿Valió la pena ahorrar cada centavo a costa de mi infancia?
Desde niña, mi madre me enseñó a vivir con lo mínimo, repitiendo que el futuro era lo más importante. Crecí sintiéndome invisible, usando ropa heredada y comiendo lo más barato, mientras ella ahorraba cada peso. Ahora, de adulta, me pregunto si realmente valió la pena sacrificar mi niñez por una supuesta seguridad financiera.