Lejos de Mamá: El precio de la libertad
En medio de una noche lluviosa en Ciudad de México, le dije a mi madre que me iba de casa, convencido de que alejarme era la única forma de sobrevivir. Mi vida siempre estuvo marcada por sus manipulaciones y chantajes emocionales, hasta que decidí romper el ciclo. Ahora, mientras enfrento la soledad y la culpa, me pregunto si realmente es posible sanar las heridas familiares.