La decisión de Juliana: Lucha por la familia y la esperanza
Me llamo Juliana y mi vida cambió para siempre el día que mi hija Ana llegó llorando a mi puerta, con mi nieta Leila de la mano. Enfrentando el colapso del matrimonio de Ana, sentí cómo viejos miedos y heridas regresaban mientras intentaba mantener unida a mi familia. Entre prejuicios, chismes y mis propias dudas, tuve que decidir qué significa ser una mujer fuerte y hasta dónde llegaría por la felicidad de quienes amo.