Simplemente se fue… Y yo vivía solo para él
Después de siete años de matrimonio, mi esposo, Julián, me dejó sin una explicación clara. Yo, Camila, había dedicado mi vida a él, intentando ser la esposa perfecta, temiendo quedarme sola en un país donde la soledad pesa más que el calor del mediodía. Ahora, enfrentando el abandono y la presión social, me pregunto si alguna vez fui suficiente o si simplemente me perdí a mí misma en el intento de no estar sola.