Amar después de los sesenta: La historia de Teresa
Tengo 63 años y, tras la muerte de mi esposo, la soledad se volvió mi única compañía. Cuando el amor volvió a tocar mi puerta, mi familia y amigos me juzgaron y se burlaron de mí. Esta es la historia de cómo enfrenté el prejuicio y la soledad para defender mi derecho a ser feliz.