Cuando el Abuelo se Mudó a Casa: Cinco Meses que Cambiaron mi Familia para Siempre
Una noche, mi suegro llamó pidiendo quedarse con nosotros, y esa decisión transformó nuestra vida cotidiana. Durante cinco meses compartimos nuestro pequeño departamento en Buenos Aires, enfrentando tensiones, secretos familiares y la necesidad de perdonar. Esta es la historia de cómo la convivencia forzada nos obligó a mirarnos de nuevo y a sanar viejas heridas.