El horario de la cocina que desató la tormenta
Una noche, mientras compartía un mate con mi vecina Natalia, me vi envuelta en el torbellino de su familia cuando su nuera propuso un horario para la cocina. Lo que parecía una solución justa terminó sacando a la luz viejos resentimientos y secretos familiares. Ahora me pregunto si la justicia en el hogar realmente puede imponerse con reglas, o si hay heridas que solo el tiempo puede sanar.